jueves, 27 de diciembre de 2012

LOS ERRORES MÁS COMUNES

Analizando mi ortografía me di cuenta de que la mayoría de mis errores eran faltas de acentuación, no en palabras normales, sino en palabras con tildes diacríticas, aquellas en las que se pone acento para distinguirlas de otras que se escriben igual y tienen un significado distinto. Para solucionar este problema busqué en internet  y encontré los casos mas frecuentes en los que cometemos error la mayoría de los mortales.

Ahí, ¡Ay! y Hay
Creo que es de los errores más comunes, ya que las tres palabras suenan igual.
Ahí: sirve para indicar una dirección, un lugar.
Hay: viene del verbo HABER, por lo tanto se escribe con hache y significa que existe algo.
¡Ay!: es una exclamación, esto significa que lo utilizarás cuando ocurra algo sorpresivo.
Compara:
·       ¡Ahí nos vemos!
·       ¡Ay que dolor!
·       Todavía hay mucho por hacer.
 y  Tu
Tú: hace referencia a tu interlocutor (segunda persona). Es un pronombre, por lo que siempre va a usarse cuando quieras indicar a alguien.
Tu: lo utilizarás cuando quieras indicar que una segunda persona posee algo.
Compara:
·       Fuiste tu verdugo (esa persona fue su propio verdugo).
·       Fuiste el culpable (esa persona tiene la culpa).
El y Él
El: es un artículo (igual que la, los y las).
Él: éste es otro pronombre y al igual que “tú”, se utiliza cuando hagas referencia a alguien.
Compara:
·       El viernes tenemos junta con el alcalde.
·       Él siempre está contando chistes.
Sólo y Solo
Solo: cuando una persona se encuentra en soledad (si puedes sustituirlo por “solito”, entonces no lo acentúes).
Sólo: si puedes sustituir en tu oración la palabra “sólo” por “solamente“, entonces lleva acento.
Compara:
·       Si no estuviera tan solo, estaría más acompañado.
·       Si sólo pudiera conseguir la llave, saldría más rápido.
Mas y Más
Mas: sin acento es una conjunción, esto quiere decir que une dos oraciones (equivale a: pero, aunque, sin embargo, no obstante, antes bien).
Más: adverbio de cantidad, significa que al comparar dos cantidades o medidas una será mayor.
Compara:
·       No puedo más.
·       No puedo, mas lo intento.
Que, Quien, Como, Donde, Cuando, frente a: Qué, Quién, Cómo, Dónde, Cuándo
Aunque parezca confuso, estos son los más fáciles de distinguir: si utilizas signos de admiración (¡!) o interrogación (¿?)… entonces ¡ponle tilde! Otra forma de saber si le pones o no le pones acento es preguntándote: ¿me refiero a una pregunta o exclamación? Si la respuesta es sí, entonces ponle tilde.
¿Cuándo no le debo poner acento? Cuando no te refieras a una pregunta o exclamación (observa con cuidado las oraciones anteriores).
Compara con atención:
·       No sé para cuándo terminaré mi tarea.
·       Cuando termine la tarea podré salir a jugar.
·       Donde te vuelva a ver, te mato.
·       ¿Dónde dejaste las llaves?
·       Quien se atreva a tocar mi comida, recibirá su castigo.
·       ¿Quién es Hideki Cuamatzi?
·       Volveré como pueda.
·       ¡Cómo te atreves a mentirme!
·       He visto ahora cómo lo has hecho.
·       Como pasta todos los días [Aquí podemos observar una particularidad del “como”: puede referirse tanto a la manera en que algo es realizado y a la conjugación del verbo “comer” en primera persona del presente (yo como pasta...)].
·       Si hubiera sabido que se me haría tarde, habría despertado antes.
·       ¿Qué color te gusta más?
·       Cuando sea grande quiero ser piloto
·       ¿Cuándo es tu cumpleaños?
Este/Esta, Aquel (y similares) frente a: Esté/Está; Éste, Aquél (y similares)
No llevan acento cuando a lo que te estás refiriendo se encuentre seguido inmediatamente (o en la misma oración) del pronombre. Llevan acento cuando el objeto, persona o lugar se encuentra atrás del pronombre, por ejemplo, en una oración antecesora de donde estás usando la palabra ‘este’, ‘aquel’, etc. Las únicas excepciones son ESTO, ESO, ESTOS y ESTOS ya que NUNCA SE ACENTÚAN.
Hay una particularidad con “este”. Hay que fijarse en qué contexto se está utilizando, ya que cuando no lleva acento, puede referirse a una dirección cardinal: oriente. Es muy fácil identificar estas situaciones. Ejemplo: El Sol sale todos los días por el este/oriente.
Cuando se acentúan funcionan como pronombres; cuando no se acentúan funcionan como artículos.
Compara con atención:
·       Esto es lo más difícil que he visto en mi vida.
·       Este perro me mordió
·       Necesito éste y éste [No estás mencionando a lo que te refieres en la misma oración donde usas ‘éste’, por lo tanto, queda implícito que se trata de algo ya mencionado o tomado en cuenta (quedó “atrás” de la oración usada). Para que no llevaran acento, el enunciado quedaría así: “Necesito este y este" (como cuando se señala algo)].
·       Aquel policía quiere mordida.
·       No me refería a ti, sino a aquél.
·       ¿Ha visto a esta sospechosa?
·       ¿Y a ésta?
Nota importante:
En español, los signos de admiración e interrogación son dos: uno que abre la oración y otro que la cierra. En otros idiomas solamente se utiliza el que la cierra.
 

domingo, 9 de diciembre de 2012

LAS EXPRESIONES TAURINAS

Como dice Manuel Guil Bozal, la lengua puede recibir desde un uso coloquial familiar hasta llegar a un nivel elegante o culto que sobrepase el uso cotidiano de la lengua. Hay también niveles especializados y específicos de grupos profesionales o sociales que tienen sus expresiones y sus vocablos propios como son los lenguajes técnicos, profesionales y científicos. En el mundo del toro, no podía ser menos, existen multitud de términos y expresiones que han traspasado la barrera de lo estrictamente taurino y han pasado a ser expresiones utilizadas por todo el mundo, incluso por antitaurinos, es muy común que aparezcan estas expresiones en la prensa escrita y en diferentes medios de comunicación.

A continuación citaré y explicaré las expresiones taurinas mas utilizadas, y probablemente algunos de los lectores se lleven las manos a la cabeza cuando descubran que algunas de las expresiones que utilizan normalmente son de origen taurino.

- Coger el toro por los cuernos:
Asumir la responsabilidad de una acción, comprometerse.

- Ver los toros desde la barrera:
Tomar precauciones, no asumir riesgos, falta de decisión, cautela

- Salir por la puerta grande:
Triunfar, Obtener un éxito completo, Alcanzar el objetivo buscado.

- Lleno hasta la bandera:
Sin ningún sitio libre, completamente lleno

- Tener mano izquierda:
Trastienda, disimulo , diplomacia,  habilidad

- Mano a mano:
Acción realizada por 2 personas colaborando, equivalente a “cara a cara”

- Torero de Salón:
Aquel que simula, no expone, representa algo con apariencia de autenticidad.
Por ejemplo, el  cantante que actúa en Playback o el político que conoce todas las preguntas que le van a realizar.

- Al alimón:
Acción hecha en colaboración o simultáneamente entre 2 o mas personas

- Estar al quite:
Estar atento o prevenido para intervenir

- Suerte y ¡Al toro!:
Frase con la que se desea la mejor fortuna en un compromiso o empeño.

- Dar la puntilla:
Rematar a alguien; terminar de destruir algo o al alguien. Proviene de la operación de rematar al toro una vez que este ha doblado.

- Echar (a alguien) un capote:
Prestar ayuda a alguien, tenderle la mano en el momento comprometido, de la misma manera que se hace en el mundo de los toros cuando hay riesgo de cogida.  

- Estar para el arrastre:
Estar en baja forma tanto moral como físicamente. Tomado del arrastre por las mulillas una vez que el toro ha doblado y ha sido apuntillado.  
     
- Saltarse a la torera:
No hacer ni caso de las normas. Proviene del salto que por encima de la barrera dan a menudo los toreros para ponerse a salvo del toro.    

- Tener más cuernos que un miura:
Puede emplearse tanto para expresar peligro como para referirse al marido al que su mujer le es infiel.  
  
- Tirarse al ruedo:
También saltar o lanzarse al ruedo. Significa encarar un asunto importante, decidirse a participar ante un grupo de personas. Proviene la expresión de las acciones de los espontáneos que se lanzan al ruedo para emular las hazañas de las grandes figuras.
 - Vestirse de luces:
Ponerse elegante. Pero no solo el torero se pone elegante para ir a los toros.

viernes, 7 de diciembre de 2012

LAS MULETILLAS

¿Qué entendemos por muletilla? ¿Una muleta para niños cojos o la muleta que emplean los enanitos del bombero torero para torear? Pues no es nada de esto, según el diccionario de la RAE una muletilla es una voz o frase que se repite mucho por hábito.
Las muletillas son algo que todos tenemos, que decimos de forma inconsciente y son muy difíciles de quitar ya que se producen porque el cerebro va mas lento que la lengua, es decir, nos ponemos a hablar mientras pensamos lo que vamos a decir.

Las muletillas que empleamos van cambiando con la edad. Desde muy pequeños la primera muletilla que usamos es “Mama” y la utilizamos para todo: Mamá pipí, mamá popó, Mamá leche…etc.
Cuando los niños llegan a educación primaria su muletilla principal es: “Que te cagas”. “Mi padre me ha comprado una Play-Station que te cagas” y también tienen otra que es “pos mi padre”… “Pos mi padre me ha comprado la Play-Station en la que salen todos los Pokemon”. “¡Pos mi padre es Pokemon y te va dar una paliza que te cagas!”
Cuando el niño llega a la pubertad, a parte de los cambios que ya sabemos que se producen, se produce un cambio en sus muletillas, a partir de esta etapa el adolescente adquiere una nueva muletilla, “el tío” entonces empieza a decir: “tío”: “¿Qué pasa
tío? ¿De que vas tío? ¿Cómo está tu tío, tío?

Con el transcurso del tiempo vamos adquiriendo nuevas muletillas y estas van determinando nuestra personalidad. Por ejemplo están los que se creen que los demás somos imbéciles y hablan así: “Estábamos en su casa, ¿entiendes?, él sacó unos refrescos, ¿entiendes? y estuvimos viendo una película, ¿entiendes?.
También hay gente que es insegura que emplea este tipo de muletillas: “Estábamos en su casa, ¿vale?, él sacó unos refrescos, ¿no? y estuvimos viendo una película, ¿no?”.
Los pijos que utilizan muletillas como: “osea”, “te lo juro” y “para nada”.

De todos modos los reyes de la coletilla son los locutores de radio musical, ya que como hablan tan deprisa no les da tiempo a pensar... Estos con cuatro coletillas y un reloj tienen el programa hecho: ¡Hey! Son las cuatro de la tarde, las tres en Canarias ¡guau! Y en treinta minutos, llegaremos a las cuatro y media ¿No te parece increíble? ¡Hay que ver como pasa el tiempo!, ayer era sábado y mañana ya es lunes, o sea que tenemos el próximo fin de semana a la vuelta de la esquina… Y seguro que bailas música como ésta…Te dejo con ella cuando son las cuatro y dos minutos de la tarde...
Los futbolistas tampoco se quedan cortos con las muletillas, y eso que estos no hablan deprisa… “Sí, la verdad es que... sí” “No, la verdad es que… no” los periodistas como son conscientes de cómo van a responder los futbolistas formulan la pregunta de forma que se lo ponen fácil para que respondan con la muletilla característica de los futbolistas.

Tras esta pequeña sátira sobre las muletillas, el lector ya habrá tomado conciencia de esta mala costumbre que todos o casi todos tenemos y probablemente quiera dejar de tenerla, a continuación dejo un enlace donde podrán  encontrar algunos consejos para hablar en público.

http://dominelaoratoria.com/blog/tecnicas-para-hablar-en-publico-como-eliminar-el-uso-de-las-muletillas.html